Mi vida con WH en República Checa
Praga, con sus construcciones milenarias y su ambiente de cuento de hadas, es una de las ciudades más bonitas de Europa. Durante mi tiempo allí, trabajé como recepcionista en el Charles Bridge Hostel, recibiendo a los huéspedes y proporcionándoles información sobre la ciudad. Además, fui anfitrión en el Hard Rock Cafe en la turística Old Town. Aunque no hablaba checo, mi inglés era suficiente para escoltar a los clientes hasta sus mesas y conversar con ellos. A pesar de que la gente local era algo fría, disfruté muchísimo gracias al ambiente multicultural del equipo y la simpatía de los turistas. La música y el ambiente del Hard Rock Cafe eran geniales; pasábamos el día bailando y disfrutando con algunos de mis compañeros de trabajo.
Una de las mejores cosas de vivir en Praga era la cerveza artesanal, considerada la mejor del mundo y sorprendentemente barata, ¡solo un dólar! Después del trabajo, solía explorar los bares underground y ocultos de la ciudad, lo cual se convirtió en parte de mi rutina. Esta experiencia en Praga no solo me permitió conocer una de las ciudades más mágicas de Europa, sino también aprender valiosas lecciones sobre la vida y la diversidad cultural.
Lee más sobre mi experiencia de WH en República Checa >
Aventuras en Norteamérica
En mi regreso a las Américas, decidí comenzar mi exploración por Norteamérica, adentrándome en las vibrantes ciudades de Canadá y Estados Unidos. En Canadá, exploré Vancouver y Toronto, maravillándome con las majestuosas Cataratas del Niágara, una de las maravillas naturales más impresionantes del continente. Luego, me dirigí a Estados Unidos, donde visité algunas de las ciudades más emblemáticas: Los Ángeles, con su glamour y playas; Nueva York, con su energía inigualable y cultura vibrante; Las Vegas, famosa por sus espectáculos y casinos; y Miami, con su ambiente tropical y vida nocturna animada.
Finalmente, mi aventura me llevó a México, un país que me conquistó por completo. Empecé en Jalisco, explorando Puerto Vallarta y Guadalajara, y continué por Guanajuato, San Miguel de Allende, Puebla y Ciudad de México. La calidez de la gente, la rica gastronomía y la animada vida nocturna de México hicieron que me enamorara perdidamente del país. Cada ciudad ofreció su propio encanto único, desde la histórica arquitectura colonial hasta las festividades vibrantes, haciendo de mi experiencia en México una de las más memorables de mi viaje.
Leer más sobre viajar por Norteamérica >
Explorando Asia
Con el dinero ahorrado en Australia, viajé por Asia, aprovechando que el cambio favorable hacía que mis recursos se estiraran aún más en esta región económica. Mi itinerario incluyó Malasia, Singapur, Tailandia, Vietnam, Camboya, Laos, Hong Kong, Filipinas, Japón, Corea e Indonesia. Cada destino ofreció una inmersión única en culturas vibrantes y sorprendentes. Con el dinero ahorrado en Australia, viajé por Asia, aprovechando que el cambio favorable hacía que mis recursos se estiraran aún más en esta región económica. Mi itinerario incluyó Malasia, Singapur, Tailandia, Vietnam, Camboya, Laos, Hong Kong, Filipinas, Japón, Corea e Indonesia. Cada destino ofreció una inmersión única en culturas vibrantes y sorprendentes.
La diversidad cultural y la riqueza de la región me dejaron sin aliento. Desde los templos dorados y las bulliciosas calles de Bangkok hasta las majestuosas montañas y campos de arroz del norte de Luzón en Filipinas, cada lugar tenía su propio encanto. En Vietnam, me asombré con la belleza de Ha Long Bay, mientras que en Japón, la mezcla de tradición y modernidad en ciudades como Tokio y Kioto me hizo sentir en un cuento de hadas futurista. En Corea, me cautivaron tanto los templos tranquilos como el ritmo urbano de Seúl. Y en Indonesia, disfruté de la vida en Bali, con sus playas exuberantes y cultura vibrante. En cada país, la comida exquisita y barata, la calidez de la gente y el costo accesible de la vida hicieron que mi experiencia fuera aún más enriquecedora. El cambio favorable me permitió disfrutar aún más de cada rincón de Asia, haciendo de este viaje una experiencia inolvidable. Sin duda, Asia me atrapó con su magia, y no dudaría en regresar una y otra vez a este lado del planeta.
Leer más sobre viajar por el sudeste asiático >
Conectando a través de imágenes
Explorar el mundo es más que solo viajar, es capturar momentos y compartir experiencias que inspiran y conectan. A continuación, encontrarás una selección de mis publicaciones de Instagram, donde cada imagen cuenta una historia de mis aventuras por el mundo. Disfruta de este vistazo a mi viaje a través de mis ojos y cámara.